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Flacidez Muscular

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¿Qué es la flacidez?

Ha sido adjudicada a la vejez, sin embargo, es un cambio que puede tener nuestro cuerpo por diversos factores. La flacidez se trata de una modificación, de forma negativa, en la elasticidad de los tejidos conjuntivos, esto viene a raíz de la pérdida de proteínas naturales, colágeno y elastina, aunque esto sea un efecto natural que pasaremos todas las personas después de los 25 años de edad, este proceso se puede acelerar y agravar.

La carencia considerable de estas fibras por parte del fibroblasto llega a ser un problema para quien lo padece, teniendo como referencia el envejecimiento de la piel, pero esta falta de producción nutrientes, no solo afecta las capas cutáneas o tisular, sino que también la pérdida de firmeza está condicionada a factores musculares.

Tipos de flacidez

La disminución de colágeno y elastina afecta distinto factores del funcionamiento corporal, si bien se ve reflejada en la caída de la piel, detrás de las capas cutáneas, distintos tejidos maculares se han visto comprometido. Se puede entender que la flacidez está segmentada en dos tipos:

  • Flacidez muscular
  • Flacidez cutánea

Además, a pesar que la flacidez es relacionada con los efectos de la edad al notar los cambios en los rasgos fáciles, la perdida de firmeza puede abarcar todo el cuerpo, mayormente aparece en el abdomen, glúteos, piernas, brazos, sin embargo, como toda nuestra anatomía esta cubierta de músculos y piel, el tono y la tersura puede disminuir en todo el cuerpo, por ello, le llamaos en términos generales, flacidez corporal

¿Qué es la Flacidez muscular?

La flacidez ha sido relacionada con la piel, pues es esta la que manifiesta los cambios de forma evidente. Sin embargo, la flacidez muscular tiene lugar en estos efectos, la cual ocurre debajo de las capas subcutáneas, donde las fibras de sustentación van perdiendo sus proteínas, lo cual tiene como consecuencia la pérdida del tono muscular.

La tonicidad disminuye, logrando que la fuerza y definición muscular sea cada vez más reducido, esto puede tener consecuencias con el funcionamiento del sistema corporal. Por ello, es importante notar cuando hay cambios en nuestro cuerpo, no dejar que la flacidez muscular llegue agravarse.

¿Cuál es la diferencia entre la flacidez muscular y la flacidez tisular?

Hay diferencia, aunque ambas sean parte de la flacidez corporal. Cuando hablamos de flacidez tisular, también conocida como cutánea, nos referimos a los efectos que degeneran la piel, la carencia de fibras en los tejidos tisulares afectan tanto la dermis como la epidermis. Las capas cutáneas al perder sus nutrientes se deshidratan, volviéndose, cada vez, menos capaz de logar la elasticidad y contracción de la piel, por ello, suele verse “caída”.

Entonces, podemos entender que la flacidez muscular es la alteración ante la carencia de las proteínas lo cual afecta fibras musculares encargados de la tonicidad, mientras que la flacidez tisular es la pérdida de nutrientes hidratantes, encargadas de dar la ternura y firmeza a la piel.

Es importante no olvidar que la piel es un órgano, el más grande de nuestro cuerpo y encargado de protegernos. Por ello, al verse afectado con la alteración de su estructura, es decir, su incapacidad de permanecer firme, pueden afectar el funcionamiento de nuestro propio sistema.

La flacidez cutánea no es algo a lo cual se le debe restar relevancia por no afectar un órgano más interno, como la muscular, lo contrario, se debe atender para evitar mayores daños y, sí, para muchos, mejorar su autoestima. Ten en cuenta que la piel tiene un gran funcionamiento, es la barrera protectora de la anatomía, encargada de la termorregulación y el balance hídrico, además de su papel estético, es parte del sistema inmunológico

Causas de la flacidez muscular

  • Con el tiempo la circulación sanguínea y el aporte de nutrientes a los tejidos disminuye, por ello se relaciona la flacidez muscular a la vejez, la producción de colágeno y elastina cada vez es más lenta con la edad.
  • El sobrepeso es uno de los factores más común, debido que la grasa toma lugar en las capas subcutáneas, haciendo que se torne lenta la regeneración de las proteínas necesarias para la tonicidad.
  • De igual forma, la pérdida de peso de forma brusca puede afectar a la flacidez muscular, esto ocurre porque al ser un cambio radical, el sistema no tiene la capacidad de reaccionar como es debido, produciendo con la producción de nutrientes
  • La menopausia hace que los músculos también se ven afectados, así como los cambios hormonales, los cuales perjudican la producción de proteínas
  • La exposición a rayos solares que producen la oxidación de los tejidos, alterando las fibras de sostén.
  • Una dieta no balanceada tendrá como consecuencia la flacidez muscular, el cuerpo requiere altas dosis de proteínas para mantenerse en forma, además, debes ayudar al sistema a la producción de colágeno y elastinas con las vitaminas y minerales aportados
  • El sedentarismo es el enemigo número de la tonicidad muscular, los tejidos poco a poc pierden s tensión y las células adiposas toman su lugar
  • Además, los elementos nocivos que se pueden consumir, como el alcohol o el tabaco reducirán la regeneración del colágeno y elastina

¿Cómo combatir la flacidez muscular?

Conociendo las causas se puede combatir la flacidez muscular de forma más efectiva, lo principal es entender que el cuerpo necesita estar en movimiento, de este modo los músculos no pierden su tono, pero, además, por sí solo no tomarán firmeza, debes ayudarles con una buena dieta, prefiriendo siempre, alimentos ricos en vitaminas, mineral y proteína, los cuales sirven de nutrientes para tomar tonicidad.

Por otra parte, es más que evidente que el cigarrillo y el alcohol son nocivos para la salud. Ten siempre presente que tu cuerpo necesita constante hidratación, ve por tus 2 litros de agua diario. Fuera de una mejora de hábitos en las rutinas y alimentación, las cremas reafirmantes te ayudarán con su aplicación haciendo masajes de forma circular, puedes hacerlo después de hacer ejercicio, antes de dormir o al despertar. Entre los tratamientos no quirúrgico, puedes encontrar, la combinación de radiofrecuencia y monoterapia